Obras Inmortales: Edgar Allan Poe

Decir cualquier cosa sobre Edgar Allan Poe después de todo lo que se escribió es una tarea dificil, redundante y en ultima instancia bastante inutil…

Resumiendo lo que todo el mundo sabe, si hoy escribo sobre el es porque fue poeta y escritor de cuentos cortos, junto con Melville y Clemens (conocido por su seudónimo Mark Twain) forman lo que para mi son los tres clásicos norteamericanos.

Además de un estilo impecable, Poe demuestra en sus escritos tener un conocimiento bastante profundo de la ciencia y filosofía de su epoca, además de un sutil sentido del humor.

Sus obras mejor logradas son sin lugar a duda sus cuentos de horror y misterio, con nota gótica y siempre jugando con lo que en su epoca aún era considerado terra incognita. A él le debemos la existencia del genero de “detectives” a la Sherlock Holmes (en la aparición de Dupin en Los Crímenes de la Calle Morgue), una interesante colaboración a la Siencia Ficción (en el viaje a la luna de La incomparable aventura de Hans Pfaal, auque ya propuesto el tema por Cyrano de Bergerac), su extraño aporte al genero Fantastico (en su única novela Las Aventuras de Arthur Gordon Pym donde explota el desconocimiento que en esa época habia de los polos), y algunos aportes a la literatura humoristica (entre los que destaca La vida literaria de Thingum Bob).

Temáticas como la mesmerización post-mortem, el enterramiento prematuro, la pena por la muerte del ser querido y la locura lo convertían sin lugar a dudas en un escritor “raro”, este echo fue seguramente el que motivo que el escritor del poema más reconocido del mundo no fuera elegido como el escritor emblemático de los Estados Unidos.

Una cosa es segura, no hubieramos tenido ni a Conan Doyle ni a Lovecraft si no fuera porque antes tuvimos a un Poe.

La edición de Obras inmortales de editorial E.D.A.F. en papel de arroz con el borde superior pintado en oro para que no se percuda con el polvo es una excelente adición para cualquier biblioteca, entre sus más de 1600 páginas pueden encontrar entre otros destacados cómo:
El escarabajo de oro, El hundimiento de la Casa Usher, El Rey Peste, La máscara de la muerte roja, El Pozo y el péndulo, El enterramiento prematuro, El caso del señor Valdemar, “Hop-Frog”, El corazón delator, La caja oblonga, El método del Doctor Tarr y del Profesor Fether, El Timo, Bon-Bon y por supuesto El Cuervo.

La traducción, es el punto flojo de la edición, a cargo de Ricardo Summers, Aníbal Froufe y Francisco Álvarez, con mayores y menores aciertos, en forma inexplicable, a mitad de “El Cuervo” se arrepienten de traducir “Lenore” por Eleonora y pasan a reemplazarlo por Leonora… en fin los dejo con la traducción junto con el original para cotejar.

El Cuervo

Cierta vez en la triste medianoche, mientras yo reflexionaba débil y cansado
Sobre varios volúmenes raros y curiosos de una ciencia olvidada;
Mientras cabeceaba, casi dormido, escuché unos suaves golpes
Como si alguien llamara suavemente a la puerta de mi casa.
“Es alguna visita –murmuré- que llama a mi puerta”
Eso es todo y nada más.

¡Ah! Con claridad recuerdo que fue en el frío de diciembre;
Cada brasa moribunda forjaba su fantasma sobre las baldosas del hogar;
Ansiosamente anhelaba el nuevo día; en vano procuraba hallar en la lectura
De mis libros una tregua al dolor; al dolor por la muerte de Eleonora
Por la radiante y singular muchacha a quien los ángeles llaman Eleonora,
Ya sin nombre, nunca más.

El triste, sedeño e incierto susurro de cada uno de los rojos cortinajes
Me estremecía – me llenaba de fantásticos terrores por mí jamás sentidos;
De tal modo que, para silenciar los latidos de mi corazón, me puse de pie repitiendo
“Es sin duda una visita que llama a mi puerta, que desea entrar,
Algún visitante tardío a la puerta de mi casa que desea entrar.”
Eso es todo y nada más.

Entonces mi alma cobró vigor y sin vacilar ya
“Caballero –dije- o señora, le ruego que me disculpe.
La verdad es que estaba adormilado y usted tan suavemente llamó
Tan suavemente vinisteis a golpear, a golpear la puerta de mi casa
Que apenas podría asegurar haberlo oído”-. Allí abrí de par en par la puerta
Solo sombras ¡y nada más!

Atisbando en la profunda oscuridad, permanecí de pie con extrañeza y temor
Dudando, soñando sueños que ningún mortal o dama se ha atrevido a soñar antes;
Pero el silencio no fue interrumpido y la oscuridad no fue turbada,
La única palabra que se escuchó fue la susurrada: ¡Leonora!
Yo la mormuraba y un eco repitió la palabra susurrando: ¡Leonora!
Sólo eso y nada más.

Volví a mi cuarto con el alma encendida
De nuevo volví a escuchar un golpeteo algo más fuerte que antes.
“Seguramente –me dije-, seguramente es la celosía de mi ventana.
Veamos pues que es lo que ocurre y exploremos ese misterio.
Corazón, tranquilízate un momento para que yo explore este enigma.”
Sólo el viento y nada más.

Abrí de un tirón el postigo, y con mucho retozo y aleteo
Entró un soberbio cuervo majestuoso, de la antigüedad.
No me hizo ningún caso; ni un instante se detuvo o se paró;
Sino que con aire de caballero o de dama, se situó sobre la puerta de mi cuarto,
Se situó sobre un busto de Palas precisamente sobre la puerta de mi cuarto.
Descansó y se posó, nada más.

Entonces aquel pájaro de ébano, obligó a mi triste imaginación a sonreír
Por el grave y severo empaque que tenía.
“Aunque tu cresta esté mocha, tú –le dije- no eres sin duda un cobarde
Cuervo viejo, bonachón y espectral que vagas en las tinieblas de la noche.
Dime, ¿cuál es tu nombre señorial en la ribera Plutónica de la Noche?”
Dijo el cuervo: “Nunca más”.

Maravillado de escuchar a aquel desmañado pájaro discurrir tan claramente
Aunque su respuesta no fuese precisa, ni cabal su sentido.
Porque no podemos dejar de coincidir en que ningún ser humano viviente
Tuvo jamás la felicidad de tener un pájaro sobre la puerta de su cuarto,
Pájaro o bestia sobre la escultura de un busto situado encima de la puerta de su cuarto,
Con un nombra: “Nunca más”.

Pero el cuervo, inmóvil sobre el plácido busto sólo dijo
Aquellas palabras, como si su alma oscura a través de ellas se vertiera.
Nada más agregó, ni movió una sola pluma.
Pero yo apenas pude murmurar: “Otros amigos me han dejado antes.
Al amanecer éste dejará, del mismo modo que de mí huyeron las esperanzas.”
Entonces el pájaro dijo: “Nunca más”.

Me sobrecogí ante el silencio roto por una respuesta tan justa.
“Sin duda –dije- lo que dice son sólo frases aprendidas
Oídas a algún maestro desgraciado a quien la desgracias
Le acosó más y más hasta que sus canciones tuvieron un solo estribillo;
Hasta que los cantos fúnebres de su esperanza, los de la muerte repitieron;
Jamás, y ¡nunca más!”

El cuervo aún continuaba incitando a toda mi alma triste a sonreír.
Arrastré un sillón hasta situarme frente al ave, el busto y la puerta;
Y entonces, hundiéndose en su terciopelo, me puse a encadenar
Fantasía con fantasía, pensando lo que aquel siniestro pájaro de antaño,
La que aquel torvo, demañado, lívido, flaco, infausto pájaro de antaño
Quiso decir graznando “Nunca más”.

Permanecí observando: pero nada trastornó la honda calma del ave,
Cuyos ojos fieros me abrasaban hasta el fondo del pecho.
Yo estaba sentado tratando de adivinar esto y más, con la cabeza reclinada
Sobre el aterciopelado almohadón que la luz de la lámpara acariciaba
Ya no volveré a estrecharlo ¡nunca más!

Entonces me pareció que el aire se hacía más denso, perfumado por un extraño incensario
Balanceado por ángeles cuyas débiles pisadas resonaban en el suelo alfombrado.
“¡Miserable! –grité-. ¡Tu dios te ha concedido, por medio de estos ángeles que te ha enviado,
Tregua, tregua y nepente para aliviar el recuerdo de Leonora!
¡Bebe, ¡oh!, de ese buen nepente y olvídala!”
Dijo el cuervo: “Nunca más”.

“Profeta –dije-, cosa del mal, ya seas pájaro o demonio,
Por ese cielo que nos circunda, por ese Dios que los dos adoramos
Dile a esta alma cargada de pesar si, en el distante Edén,
Abrazará alguna vez a la santa doncella a quien los ángeles llaman Leonora;
Si abrazará a la radiante y única doncella a quien los ángeles llaman Leonora.”
Dijo el cuervo: “Nunca más”.

“¡Ésa es la voz de la partida, pájaro o demonio!”, grité, alzándome.
“¡Regresa a tu tempestad y a la ribera Plutónica de la Noche!
¡No dejes ni una pluma negra como rastro de esa mentira que tu alma ha pronunciado!
¡Deja intacta mi soledad! ¡Deja el busto sobre mi puerta!
¡Quita el pico de mi corazón y lleva tu figura lejos de mi puerta!
Contestó el cuervo: “Nunca más”.

Y el cuervo sin moverse, todavía siguió posado, todavía permanece
Sobre el pálido busto de Palas precisamente encima de la puerta de mi cuarto
Y sus ojos tienen toda la apariencia de un demonio que está soñando;
Y la luz de la lámpara al iluminarlo arroja su sombra sobre el piso.
No será liberada ¡Nunca más!



Y en su versión original:

The Raven

Once upon a midnight dreary, while I pondered, weak and weary,
Over many a quaint and curious volume of forgotten lore,
While I nodded, nearly napping, suddenly there came a tapping,
As of some one gently rapping, rapping at my chamber door.
"'Tis some visitor," I muttered, "tapping at my chamber door —
Only this, and nothing more."
Ah, distinctly I remember it was in the bleak December,
And each separate dying ember wrought its ghost upon the floor.
Eagerly I wished the morrow; — vainly I had sought to borrow
From my books surcease of sorrow — sorrow for the lost Lenore —
For the rare and radiant maiden whom the angels name Lenore —
Nameless here for evermore.

And the silken sad uncertain rustling of each purple curtain
Thrilled me — filled me with fantastic terrors never felt before;
So that now, to still the beating of my heart, I stood repeating,
"'Tis some visitor entreating entrance at my chamber door —
Some late visitor entreating entrance at my chamber door; —
This it is, and nothing more."

Presently my soul grew stronger; hesitating then no longer,
"Sir," said I, "or Madam, truly your forgiveness I implore;
But the fact is I was napping, and so gently you came rapping,
And so faintly you came tapping, tapping at my chamber door,
That I scarce was sure I heard you"— here I opened wide the door; —
Darkness there, and nothing more.

Deep into that darkness peering, long I stood there wondering, fearing,
Doubting, dreaming dreams no mortal ever dared to dream before;
But the silence was unbroken, and the stillness gave no token,
And the only word there spoken was the whispered word, "Lenore?"
This I whispered, and an echo murmured back the word, "Lenore!" —
Merely this, and nothing more.

Back into the chamber turning, all my soul within me burning,
Soon again I heard a tapping somewhat louder than before.
"Surely," said I, "surely that is something at my window lattice:
Let me see, then, what thereat is, and this mystery explore —
Let my heart be still a moment and this mystery explore; —
'Tis the wind and nothing more."

Open here I flung the shutter, when, with many a flirt and flutter,
In there stepped a stately raven of the saintly days of yore;
Not the least obeisance made he; not a minute stopped or stayed he;
But, with mien of lord or lady, perched above my chamber door —
Perched upon a bust of Pallas just above my chamber door —
Perched, and sat, and nothing more.

Then this ebony bird beguiling my sad fancy into smiling,
By the grave and stern decorum of the countenance it wore.
"Though thy crest be shorn and shaven, thou," I said, "art sure no craven,
Ghastly grim and ancient raven wandering from the Nightly shore —
Tell me what thy lordly name is on the Night's Plutonian shore!"
Quoth the Raven, "Nevermore."

Much I marveled this ungainly fowl to hear discourse so plainly,
Though its answer little meaning— little relevancy bore;
For we cannot help agreeing that no living human being
Ever yet was blest with seeing bird above his chamber door —
Bird or beast upon the sculptured bust above his chamber door,
With such name as "Nevermore."

But the raven, sitting lonely on the placid bust, spoke only
That one word, as if his soul in that one word he did outpour.
Nothing further then he uttered— not a feather then he fluttered —
Till I scarcely more than muttered, "other friends have flown before —
On the morrow he will leave me, as my hopes have flown before."
Then the bird said, "Nevermore."

Startled at the stillness broken by reply so aptly spoken,
"Doubtless," said I, "what it utters is its only stock and store,
Caught from some unhappy master whom unmerciful Disaster
Followed fast and followed faster till his songs one burden bore —
Till the dirges of his Hope that melancholy burden bore
Of 'Never — nevermore'."

But the Raven still beguiling all my sad soul into smiling,
Straight I wheeled a cushioned seat in front of bird, and bust and door;
Then upon the velvet sinking, I betook myself to linking
Fancy unto fancy, thinking what this ominous bird of yore —
What this grim, ungainly, ghastly, gaunt and ominous bird of yore
Meant in croaking "Nevermore."

This I sat engaged in guessing, but no syllable expressing
To the fowl whose fiery eyes now burned into my bosom's core;
This and more I sat divining, with my head at ease reclining
On the cushion's velvet lining that the lamplight gloated o'er,
But whose velvet violet lining with the lamplight gloating o'er,
She shall press, ah, nevermore!

Then methought the air grew denser, perfumed from an unseen censer
Swung by Seraphim whose footfalls tinkled on the tufted floor.
"Wretch," I cried, "thy God hath lent thee - by these angels he hath sent thee
Respite — respite and nepenthe, from thy memories of Lenore
Quaff, oh quaff this kind nepenthe and forget this lost Lenore!"
Quoth the Raven, "Nevermore."

"Prophet!" said I, "thing of evil! — prophet still, if bird or devil! —
Whether Tempter sent, or whether tempest tossed thee here ashore,
Desolate yet all undaunted, on this desert land enchanted —
On this home by horror haunted— tell me truly, I implore —
Is there - is there balm in Gilead? — tell me — tell me, I implore!"
Quoth the Raven, "Nevermore."

"Prophet!" said I, "thing of evil - prophet still, if bird or devil!
By that Heaven that bends above us - by that God we both adore -
Tell this soul with sorrow laden if, within the distant Aidenn,
It shall clasp a sainted maiden whom the angels name Lenore -
Clasp a rare and radiant maiden whom the angels name Lenore."
Quoth the Raven, "Nevermore."

"Be that word our sign in parting, bird or fiend," I shrieked, upstarting —
"Get thee back into the tempest and the Night's Plutonian shore!
Leave no black plume as a token of that lie thy soul hath spoken!
Leave my loneliness unbroken!— quit the bust above my door!
Take thy beak from out my heart, and take thy form from off my door!"
Quoth the Raven, "Nevermore."

And the Raven, never flitting, still is sitting, still is sitting
On the pallid bust of Pallas just above my chamber door;
And his eyes have all the seeming of a demon's that is dreaming,
And the lamplight o'er him streaming throws his shadow on the floor;
And my soul from out that shadow that lies floating on the floor
Shall be lifted — nevermore!



A pesar de esto, la edición está muy por encima de la calidad de cosas que se pueden conseguir hoy, enre las que destaca una publicación de editorial Claridad de “Las aventuras de Arthur Gordon Pym” a la ¡que le mutilaron el final!... una razón más para visitar las librerías de usados.

Medio Apu por la calidad de la traducción...

Las Mil y Una Noches

"Las Mil y Una Noches" son una cuantiosa recopilación de historias y fábulas que se hicieron universalmente famosas por exponer formas culturales desconocidas y despertar la fascinación de la anquilosada Europa del siglo XIX.

Pocos libros despiertan el interés y la fantasía de personas de tan diversas edades y trasfondos culturales como lo hacen "Las Mil y Una Noches". No es poco frecuente haberse encontrado con algunos de sus cuentos en la infancia (mutilados para esta audiencia), y volver ya más grande a buscar la versión íntegra sin censura.

Voy a dejar de lado el debate sobre sus orígenes (Indio, Árabe o Persa), y no voy a hablar mucho sobre la gran cantidad de traducciones que se han hecho y sus diversas virtudes y defectos.

A mi entender, y por lo que pude alcanzar a leer de las traducciones a las que pude echar mano, las mejores traducciones a la lengua castellana son la traducción indirecta que hace Vicente Blasco Ibañez, y la traducción directa de R. Cansinos Assens.

La obra de Blasco Ibañez es amena y bastante actual en su lenguaje, sin utilizar muchos términos de origen Árabe. Contrariamente, la obra de Cansinos Assens trata de utilizar todos los términos de origen Árabe y alcanzar una interpretación más completa del original, complementando con una gran cantidad de notas al estilo de la versión inglesa de Francis Burton.

Expongo aquí la obligada invocación ritual a Alá y su Profeta, en ambas versiones.

Traducción directa del árabe por J. C. Mardrus, versión en español de Vicente Blasco Ibañez:

¡En el nombre de Alá el clemente, el misericordioso!
¡La alabanza a Alá, amo del Universo! ¡Y la plegaria y la paz para el príncipe de los enviados, nuestro señor y soberano Mahoma! Y, para todos los tuyos, la plegaria y la paz siempre unidas esencialmente hasta el día de la recompensa…
¡Y después…!, que las leyendas de los antiguos sean una lección para los modernos, a fin de que el hombre aprenda en los sucesos que ocurren a otros que no son él. Entonces respetará y comparará con atención las palabras de los pueblos pasados y lo que a él ocurra, y se reprimirá.
Por esto, ¡gloria a quien guarda los relatos de los primeros como lección dedicada a los últim
os!
De estas lecciones han sido entresacados los cuentos que se llaman Las Mil Noches y Una Noche, y todo lo que hay en ellos de cosas extraordinarias y de máximas.


La traducción directa de R. Cansinos Assens, anotada y cotejada con las principales versiones en otras lenguas:

¡En el nombre de Alá, el Piadoso, el Apiadable! ¡La loanza a Alá, el Rey, el Benéfico, el Creador del Universo, Señor de los Tres Mundos; que levantó el Firmamento sin columnas para sostenerlo y extendió la Tierra como un lecho, y la oración y la paz sobre nuestro Señor Mohammed y sobre su familia y sus compañeros; oración y bendiciones perdurables y gracia que hasta el Dia de la Chenta permanezca inalterable. ¡Amin! Y después: En verdad los hechos y los dichos de los que nos precedieron encierran semblanzas y ejemplos para los hombres de los tiempos nuevos; para que vea el hombre que piensa lo que a otros les sucedió y reflexione y saque de ello provechosa advertencia, y repase las crónicas de los antiguos pueblos y todo cuanto les acaeció a ellos y se contenga y ponga freno. ¡Loor, pues, a Aquel que de las historias del Pasado hizo una admonición para el Presente! Ahora bien: de tales ejemplos las historias llamadas Mil Y Una Noches, con todo lo que en ellas hay de rarezas y maravillas y leyendas.

La versión de Cansinos Assens traduce “En el nombre de Alá, el piadoso, el apiadable” a diferencia de otros intérpretes, para exponer lo que en el texto árabe es rahman y rahmin, que son sinónimos derivados de la misma raíz rhm (piedad), con la diferencia de que el primero es piadoso de lo suyo y el segundo es quien se apiada cuando lo invocan.

Hubo traducciones que evitaron esta invocación, y las hubo peores que reemplazaron Alá con Dios. Fruto sin duda de una cultura más religiosa.

La traducción de Blasco Ibañez está disponible en varias ediciones de diversas editoriales y a precios muy variados. Desgraciadamente la de Cansinos Assens sólo puede conseguirse en Editorial Aguilar, absolutamente agotado… usado se lo consigue por no menos de U$S 450, eso sí es una pequeña obra de arte, forrado en cuero en papel biblia y con ilustraciones color.



3:10 to Yuma


Seguramente les pasó como a mí y pensaron que con "Unforgiven" Eastwood le daba al western el cierre definitivo. Con el correr de los años, este parecer no hizo más que reforzarse con tímidos films que solo aumentaron la nostalgia de los amantes del género.
En lo personal no soy un amante del western, pero es agradable tener la posibilidad de disfrutar ocasionalmente de algo diferente.
Bueno, este es el caso de "3:10 to Yuma", que recupera casi todos los elementos del western de mediados del siglo pasado. Digo casi todos, porque está ausente el personaje frío, duro y calculador, ese que usualmente representaba Eastwood en los '60, que alcanza su pico en "Il Buono, il brutto, il cattivo" de Sergio Leone.
Volviendo a "3:10 to Yuma", las actuaciones de Bale y Crowe son impecables, lo mismo que el soporte de Foster y Lerman.
"3:10 to Yuma" es un film impecable, con una excelente dirección por parte de James Mangold, y a diferencia de otras películas recientes, se mete de lleno en la temática, y llega al tope de lo que el género puede dar con el desfile de disparos de los últimos quince minutos.
Ya que hablamos de westerns, unas breves palabras sobre "The Assassination of Jesse James by the Coward Robert Ford" una película con actuaciones demasiado afectadas, incapaz de respetar el ritmo que el género demanda, donde lo más interesante es la fotografía y la actuación de Sam Rockwell como el mayor de los hermanos Ford. En definitiva, un film con nombre y duración demasiado largos, y con Brad Pitt en lugar de Jesse James.
No dejen pasar la oportunidad de ver "3:10 to yuma"







Dell 2707WPF-HC

Hace un par de semanas, tentado por el cambio de monitor que hizo un amigo, me puse a investigar un poco con que podía reemplazar mi LG de 19". La verdad es que no estaba muy decidido hasta que encontré esta bestia que ven a la izquierda. Se trata del "Dell 2707WPF-HC", es difícil exponer lo que se siente estando frente a un monitor de 27"… más cuando es uno de esta calidad. Pongo un breve listado de las características distintivas:

  • Velocidad de respuesta típica de 6ms
  • Contraste de 1000:1
  • Resolución nativa de 1920 x 1200
  • Un amplio rango de colores que cubre el 92% del Gamut NTSC
  • Conector DVI que cumple con el estándar HDCP, S-Video y Video compuesto.
  • Picture in Picture para las diferentes conexiones.
  • Y una batería de puertos de todo tipo, entre ellos 4 puertos USB y los 9 tipos de puerto necesarios para enchufar la memoria de cualquier cámara digital.

¿Qué se hace con un monitor de 27"? Bueno, lo primero es ponerlo sobre la mesa, mirarlo un rato sin hacer nada y felicitarse a uno mismo por la compra. ¿Y después? Después es hora de volver a ver todo con nuevos ojos, y comprobar que lo que antes estaba bueno, ahora es increíble. Por ejemplo:
 
  1. Ver una película HD (en mi caso un Blu-ray de "The Nightmare Before Christmas" en 720p)
  2. Jugar "Civilization IV" en 1920x1200…
  3. Jugar Mame estirado pero manteniendo el aspect-ratio... "Stret Fighter III: 3rd Strike" como en los videos pero mejor.
  4. Ver una planilla de Excel de 20 columnas sin tener que hacer scroll horizontal.
  5. Poner wallpapers de paisajes en 1920x1200.
  6. Editar imágenes en "Photoshop", "Paint Shop Pro", etc…
  7. Alejarse del monitor para poder ver los costados (es el primer monitor que me obliga a sentarme derecho).

Comparándolo con mi viejo LG, uno al lado del otro, el brillo y nitidez de los colores del Dell hace que parezca que delante del LG hay un espeso film de plástico no del todo trasparente. La comparación no es justa, porque son dos categorías completamente diferentes, pero sirve para hacerse a una idea de la diferencia real que existe entre un monitor de lujo y los otros.

En su contra, es bastante caro, y los 95 Watts de consumo implican bastante calor viniendo de la pantalla.





Gestión de Proyectos


Las vueltas de la vida me consiguieron un puesto en Programación en el Commissioning de un importante proyecto.
En Programación asistimos en todas las tareas de coordinación del Commissioning, esto es seleccionando el personal, capacitándolo y desde luego realizando la programación.
La programación del proyecto se realiza utilizando un software especializado de la empresa Primavera Software (no usamos M$-Project), y tuve la suerte de participar en los cursos avanzados del software que nos dio la gente de Metacontrol.
A modo de complemento, y estamos llegando al tema en cuestión, decidí seguir en paralelo la lectura de “Gestión de Proyectos”, de Pablo Lledó y Gustavo Rivarola. La razón fundamental que me motivo a hacerlo es que Primavera es un software estructurado según los lineamientos del PMI (Project Management Institute), y parecía una buena idea reforzar los fundamentos teóricos con un libro que siguiera estos lineamientos en la gestión de proyectos.
Fueron dos semanas intensivas e interesantes, aprender a manejar el software fue una buena experiencia, lo mismo que entrar un poco más en el "American Way" de la administración de proyectos.
Ahora la desilusión, próximo a recibirme en la carrera de Licenciatura en Administración de la Universidad de Buenos Aires, tengo que decir que encontré el contenido del libro bastante pobre y simplista… Al principio creí que sería culpa de los autores, pero tras consultar publicaciones del extranjero que también seguían los lineamientos del PMI observe que las faltas son más atribuibles al modelo que al libro.
De la misma forma que el contenido de un MBA suele ser un resumen de la carrera de Licenciatura en Administración orientado a la gestión de grandes empresas, el PMI presenta un modelo mínimo con un raquítico respaldo teórico.
Estandarizar el proceso de administración de proyectos no es una hazaña menor que viene acompañada de muchos beneficios, pero limitarse a la modelización del PMI es simplificar la administración y el conocimiento de las organizaciones hasta el absurdo.
Volviendo al libro, es una forma fácil y rápida de entrar en contacto con el mundo del PMI, incluye algunos capítulos que incluso exceden el alcance de este, y una breve explicación de cómo utilizar algunas herramientas útiles en la administración de proyectos.
Si te interesa la administración de proyectos al estilo ejecutivo de traje y corbata, o incorporar el lenguaje utilizado en la mayoría de los proyectos de grandes empresas, este es el lugar para empezar.




George Bernard Shaw: Obras Completas

Meses atrás tuve la suerte de encontrar en una librería, perdida en la calle Cabildo, las obras ¿completas? del dramaturgo irlandés George Bernard Shaw. La obra consta de diez volúmenes con sobre-cubierta, bastante gastados en su exterior, pero por suerte con todas las hojas y una muy buena tipografía. Traducción de Julio Brouta, editados en 1944 por Editorial Americana (de la época en que en Buenos Aires había editoras que se animaban a publicar esta clase de obras).

George Bernard Shaw, escritor irlandés nacido a mediados del siglo XIX, fue la única persona ganadora del Premio Nobel de literatura (1925) y un Oscar por mejor guión (1938). La mayor parte de su carrera como escritor la realizó en Londres, donde escribió algunas novelas que fueron repetidamente rechazadas por los editores, hasta que consiguió un espacio en el diario Star, donde comenzó su carrera como crítico. Su éxito lo alcanzó en el teatro, donde produjo cerca de 63 obras.

Contemporáneo de Oscar Wilde, Shaw se reconoce en deuda con Ibsen, de quien recoge una amplia influencia que se percibe en buena parte de sus obras dramáticas. És
tas, vienen usualmente acompañadas de un largo prologo, a modo de ensayo introductorio, donde se puede leer la opinión del autor sobre los temas tratados en la obra, Borges entre otros decía que al verdadero Shaw hay que buscarlo en sus prólogos más que en sus obras.

Shaw suele tratar defectos institucionales de la cultura occidental que él piensa deben reformarse, entre estos se encuentran la educación, el matrimonio, la religión, la política, el sistema de salud y los privilegios de las clases sociales. Pero el verdadero tema de fondo, como socialista que era, fué la liberación de la clase trabajadora de la explotación que sufría en la era Victoriana. Todo esto rebajado con un humor irónico para agradar a las masas y no ser tan agresivo para la clase dominante.

Por ahora solo tuve tiempo de leer el primer tomo, que contiene “Non Olet”, “Fascinación” y “L
a Profesión de la señora Warren”, todas obras excelentes, destacándose obviamente “La Profesión de la señora Warren”, donde hay que destacar la vitalidad y fuerza que da a Vivie, la hija de la Señora Warren, una adolescente moderna dispuesta a separarse de su madre para llevar la clase de vida que ella desea.

Por todo esto, cuatro Apus para Shaw, si encuentran algo de él no pierdan la oportunidad de leerlo, desgraciadamente hace mucho tiempo que no se edita algo en español de este autor, y es difícil de encontrar algo más que “La Profesión de la señora Warren”… una buena razón para visitar las librerías de usados.


He Was a Quiet Man

Un hombre atormentado por la complejidad de la vida moderna, en búsqueda de una salida… Esta podría ser la premisa básica detrás de la última película de Frank A. Cappello, “He Was a Quiet Man”.

Las analogías con "American Psycho" o "Fight Club" son evidentes, sumándose al creciente número de películas que tratan con una búsqueda imposible, la salida de un mundo que hoy por hoy ve reflejada la globalización en algo más que el sistema financiero y de tele-comunicaciones.

Bob Maconel, el personaje principal caracterizado por un Christian Slater casi irreconocible, comienza la película cuestionando los valores modernos de la sociedad y preguntando si esto es verdaderamente progreso. Maconel presenta esta nostalgia por la época dorada, por tiempos más simples donde el hombre era el hombre y se sabía quién era el enemigo, como una excusa por sus tormentos.

Aunque suave en lo visual “He Was a Quiet Man” presenta algunas realidades (Asesinatos, Suicidio, Soledad, Amor) en forma cruda y bastante fuerte. Con un par de giros argumentales, una breve historia de amor y un toque de morbo, el film se diferencia por un trabajo de cámara inusual y algunas rarezas que desgraciadamente no terminan de convencer.